Los niños de la guerra

LOS NIÑOS DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA

 

La cruel guerra que destruyó los pueblos y ciudades de España, que causó miles de víctimas, que generó una represión inhumana nunca vista hasta entonces, también provocó la huida de cientos de miles de hombres, mujeres y niños. Huían de una masacre segura, de la miseria más extrema o de la represión de los vencedores.

21 de septiembre memoria de la guerra civil espanola 3

Las primera víctimas de esta huída fueron los niños. Los bombardeos de Durango, el 31 de Marzo de 1937, y de Guernica, el 26 de Abril del mismo año, por la Legión Cóndor de los nazis, encendieron la alarma. El gobierno vasco hizo un llamamiento al mundo para que acudiera en auxilio de sus tierras y sus niños. Desde ese momento, salieron más de treinta mil niños. Muchos países acudieron a la llamada. Una tercera parte de los que se fueron jamás regresaron. Fueron las víctimas primeras e inocentes a los que hay que añadir los casi ciento veinte mil que murieron durante la guerra.

 

A Francia fueron a parar la mayoría de aquellos niños. Fueron repartidos en familias de acogida o en colonias, instalados en hoteles, casas de campo, palacetes y conventos. Al final de la guerra muchos regresaron. Los hijos de los vencidos se reunieron con sus padres en el exilio, si habían sobrevivido a la guerra.

 

Bélgica recibió el segundo grupo de niños exiliados. A Rusia llegaron más de tres mil en cuatro expediciones. La primera fue el 17 de Marzo de 1937. El buque Gran Canaria llegó a Odessa con hijos de políticos de la República y de oficiales del Partido Comunista, entre ellos Amaya, la hija de La Pasionaria.

 

El gobierno británico se negó a dejar entrar en el Reino Unido a refugiados españoles no combatientes. Después del bombardeo de Guernica, consintió la entrada de niños, a condición de que su cuidado y mantenimiento dependieran del National Joint Committee for Spanish Relief, sin que pudieran recibir subvención pública. Esta organización se encargó de todos los trámites del transporte en barcos y de la acogida de niños en suelo británico.

 

A diferencia de los británicos, el presidente mexicano Cárdenas acogió con entusiasmo a los niños refugiados. Su mujer, Amalia, presidió el Comité de Ayuda a los niños del pueblo español, que se encargó  de su traslado e instalación en Morelia, en el Estado de Michoacán. Aquí les recibieron miles de personas. Fueron alojados en el internado Escuela España-México, dos viejos caserones expropiados a la Iglesia, antiguos seminarios.

 

Hijos de estos niños de la guerra vuelven estos día a España para conocer el lugar de sus antepasados. Aquí se les mantiene en el olvido. La memória histórica es frágil.

Para saber más sobre refugiados de la guerra: DIARIOS DE LA REINA DEL OCÉANO.

 

 

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Comentarios (1)

Pedro
  • 1. Pedro | 17/02/2017
Los niños que llegan a los campos de refugiados no deberían hacer pensar. Nuestro reconocimiento al sufrimiento de los niños de la guerra españoles nunca será el merecido. Gracias

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